
TRABAJOS CON FIBRAS NATURALES
CESTEROS
Es uno de los oficios más antiguos de la Humanidad que se conocen. Griegos, romanos, musulmanes hasta nuestros días se ha llevado a cabo este arte, aprovechando los recursos naturales de cada zona, y dándole otra vida en forma de canasto, palmito, atizador, panera, y un sinfín de formas que la imaginación y las necesidades de cada época las han hecho imprescindibles.
En nuestra comarca también fue un pilar importante en la economía de muchas familias, y lo ha sido hasta finales del S.XX, de los 5 talleres que había hacia los años 50 no queda ninguno. Actualmente se combina con otros trabajos y se hace más como pasatiempo doméstico.
Los materiales con los que se trabajaba en el Alto Palancia eran el MIMBRE y la CAÑA. Son fibras naturales que se pueden encontrar en las orillas de ríos y monte bajo.
Las herramientas para manipularlas eran muy rústicas pero muy útiles: partidores de caña, pelador, punzón o aguja, tijeras. La técnica más usada en nuestra comarca es el entretejido, consistente en entrecruzar, transversalmente las varas o tiras de fibra y así forman la urdimbre del objeto en sí.
SERONEROS O ESPARTEROS
Es otro de los oficios artesanos del Alto Palancia que se conoce desde los fenicios, aunque es con los romanos los que lo nombran cuando lo usan para sacos, esteras, alpargatas y útiles navales como sogas. Hay que destacar Castellnovo y Almedijar cómo las localidades donde más se desarrolló.
Era otra de las sub economías domésticas, donde los más desfavorecidos intercambiaban en forma de trueque. Entró en crisis a finales del S.XX, cuando la aparición de otras fibras, sobre todo sintéticas, las dejan de comprar.
Los pocos esparteros que subsisten en la actualidad lo hacen gracias al turismo y los encargos personalizados.
El esparto crece en terrenos áridos, arcillosos, que abundan en nuestra comarca. Las herramientas que usan también son muy sencillas y todas manuales, no han variado a lo largo de los años.
Los objetos que más se han fabricado con este arte son serones, espartines para prensar el aceite, sogas, aventadores, alfombras,…
“Si en Almedijar te casas no dejarás de aprender a hacer serones y sarias y llevarlos a Segorbe a vender”.
(Dicho popular Libro “Aproximación a las Artesanías del Alto Palancia”).
SOGUEROS O CORDELEROS
Tiene su origen en la prehistoria, usando toda la planta del cáñamo: las ramas para los sogueros y las semillas o cañamones para pienso para el ganado.
Esta profesión se extinguió hace mucho en la comarca, desde que aparecieron las fibras sintéticas.
Herramientas como la grama o pinzas para machacar el cáñamo; la espada para cepillarla y la máquina de torcerlo, son las herramientas que forman parte del proceso de fabricación de la soga.
ESPARTEÑEROS
La confección de alpargatas tuvo cierta importancia en la economía del Alto Palancia.
Se documenta en el S.XVI y en el S.XIX cuando se dio un hecho curioso, hubo un enfrentamiento entre el Gremio de Alpargateros y el de zapateros y el lugar que debían ocupar en la procesión del Corpus.
Se fabricaban dos tipos de alpargatas: La de suela de fibra cubierta de lona, Y la de suela, puntera y talón de fibra vegetal.
CORTINEROS O PERSIANEROS
Estas profesiones trabajaban el junco, el baladre y el maíz. Los juncos crecían a la orilla del río Palancia. Se recolectaban en verano, verdes y se cortaban en trozos de 3 cm, los cuales se ensartaban en un hilo. Estos hilos se colgaban de una madera, a la altura deseada según fuera el hueco a proteger.
El baladre también se usaba para hacer cortinas, con una técnica muy parecida a la del junco. Su decadencia llegó con los canutos de plástico y las piezas metálicas.
Las pellorfas u hojas de maíz se usaban para relleno de colchones y trenzado de materiales.
SILLEROS
Se dedicaban a la reparación de sillas, y trabajaban junto con los cesteros y seroneros.
Era una profesión itinerante, se recorrían los pueblos de la comarca arreglando asientos de sillas y mecedoras. Se usaba la anea, que recogían en el río.
CAÑICEROS
La caña es un material muy abundante en nuestra comarca, donde crece en los ríos y ramblas.
Se le daba varios usos: desde mangos de escoba, bufadores para chimeneas, mango con un pincel en el extremo para pintar, para cultivar tomates haciendo barracas para que se sustentaran, y sobre todo para hacer cañizos. Los cañizos eran tejidos de caña que se usaban para secar frutas y/o verduras, para hacer techos en las casas.
También se fabricaban con cañas instrumentos musicales de varias tesituras.






